Si bien la garrapiñada se elabora a partir del maní, se puede hacer con cualquier fruto seco o semilla.
Elaboraciones similares con nueces, pistachos, almendras, castañas de cajú o semillas de sésamo son muy populares en el mundo árabe; en España son comunes las de almendras.
Con el precio actual de los frutos secos, las más tradicionales en nuestro país, las de maní, son las más indicadas para experimentar en casa.
La primera receta de garrapiñada conocida (peanut candy) es autoría de Emma Paddock Telford, publicada en su libro, de 1908, “The Evening Telegram Cook Book”, aunque no llevaba vainilla y recomendaba dejar enfriar los maníes caramelizados para luego cortarlos en cuadrados.
Hacerlas en casa es más fácil de lo que parece. ¿El secreto? no dejar de revolver, según recomienda Claudia Cabrera, la autora de la receta que compartimos.
Ingredientes
1 taza de maní crudo con cáscara
Media taza de azúcar
Un cuarto de taza de agua
1 cucharada de esencia vainilla
Preparación
- En una olla o sartén con fondo grueso colocar el agua, los maníes y el azúcar, a fuego medio; revolver y agregar la esencia; seguir revolviendo hasta que se evapore el agua.
- Retirar del fuego y seguir revolviendo hasta que se cristalice el azúcar (se pondrá blanquecina y se apelotonará).
- Llevar al fuego nuevamente, revolviendo de forma constante hasta que llegue a punto caramelo.
- Colocar en una placa y esperar que se enfríen; se separarán fácilmente.
¡Buen provecho, golosos!