«El mercado se está moviendo con lentitud», comenta Bárbara de Amonarraiz, analizando no solo el movimiento que se verifica en el alquiler temporario para la inminente primavera sino también anticipándose a la próxima temporada estival en Monte Hermoso.
Gastón Epherra, consultor inmobiliario bahiense, advierte que los propietarios se muestran muy razonables con los valores que pretenden, acompañando la complejidad de la situación actual y entendiendo que, a pesar de todo, este es un buen momento para el mercado inmobiliario.
Con relación a los precios, Epherra pone como ejemplo, «un complejo de viviendas tipo cabañitas, para 7 personas, buscado específicamente por jóvenes en esta época, a dos cuadras de la playa, se alquila entre 30.000 y 50 mil pesos por día, dependiendo de la capacidad y de las comodidades».
Otra fuente consultada hace referencia a un dúplex para 6 personas a dos cuadras de la playa, en zona lindante a barrio Las Dunas, que se ofrece en 35.000 pesos por día.
Según la experta local, «los precios oscilan entre 30 mil, lo más económico, lo chiquito, lo sencillo, y 90.000 mil pesos por día en el caso de propiedades con más capacidad, buena ubicación y de categoría».
En todos los casos, dice Bárbara, «el mínimo es por tres días» y en muchos anuncios se advierte que solo se ofrece en alquiler a familias.
Agrega que hay disponibilidad de casas desde 70.000 y departamentos con precios entre 45 y 55.000 pesos.
«Hay mucho por alquilar todavía, estamos cerrando operaciones en lo que es la primera, segunda o tercera línea de playa».
Comenta que «el mercado se mueve con lentitud, hay mucha gente consultando por la temporada pero no hay precios para dar por ahora».
Del lado de la oferta, abundan anuncios de propiedades en alquiler para el verano, casi todos con una descripción detallada de la vivienda disponible, ninguno con indicación del precio.
¿Alquileres dolarizados?
Los movimientos en el dólar blue y la devaluación oficial de 22 por ciento en el tipo de cambio oficial, en medio de la campaña electoral, están alterando los planes y previsiones para las próximas vacaciones veraniegas.
El intendente de Pinamar, Martín Yeza, se refirió a eso al comentar lo que ocurre con los alquileres en esa ciudad costera, donde los propietarios eligen dolarizar los precios para mantener el valor de sus viviendas.
Hay noticias sobre que lo mismo está sucediendo en Mar del Plata, Cariló y otros distritos costeros de veraneo de la Costa Atlántica.
«Nadie en este momento de la Argentina cerraría un acuerdo en pesos y que te vayan pagando a diciembre con un congelamiento del precio», dijo Yeza, quien además destacó que entrando en el mes de septiembre no hay precios fijados y los que están se establecen en dólares.
Si bien los contratos de locación en moneda extranjera actualmente no son legales, los de alquiler temporal o vacacional sí permiten que el precio sea establecido en dólares.
Esta incertidumbre, se añade, está influyendo no solo en la locación de propiedades sino también para la contratación de todo tipo de servicio, incluyendo los precios de balnearios en cuanto al alquiler de carpas, sombrillas, etcétera.
Con este panorama incierto, los prestadores de la costa prevén una buena temporada, como se ha dado en los dos últimos veranos, con reservas de último momento y picos de ocupación durante enero.