La revista culinaria Taste Atlas publicó un listado con los 150 mejores restaurantes legendarios del mundo, en la que aparecen cuatro argentinos: una fonda patagónica, una parrilla y dos pizzerías porteñas, dos de ellas, incluso, en el top 25.
Un bodegón de Bariloche, La Fonda del Tío, y las porteñas Don Julio (parrilla), El Cuartito y Güerrín (pizzerías) merecieron la distinción.
El primer puesto se lo llevó un restaurante de cocina vienesa tradicional llamado Figlmüller, en un ranking que considera locales gastronómicos de todo el mundo y que también destaca la comida de Indonesia, Estados Unidos, México, Italia, Rumania, República Checa, India, Alemania e Irlanda.
«Estos no son solo lugares para comer, sino destinos por derecho propio, comparables a los museos, galerías y monumentos más famosos del mundo. Cada uno ha resistido la prueba del tiempo, evitando los trucos de moda en favor de una cocina tradicional de alta calidad», introduce Taste Atlas.
Sobre Don Julio, ubicada en el puesto 63, destaca la publicación: «Fundado en 1999, con los años, se convirtió en una institución en Buenos Aires, reconocida por sus carnes y sus notables bodegas. Los visitantes hacen fila frente al restaurante en Palermo Soho para disfrutar del delicioso asado y la impresionante lista de vinos».
La parrilla se ha convertido en un verdadero punto turístico de la Capital, a menudo visitada por celebridades locales e internacionales. En marzo, Lionel Messi revolucionó al barrio entero al llegar de sorpresa a Don Julio, por donde han pasado también los actores Robert Pattinson, Jared Leto y Matt Damon y hasta la ex canciller alemana Angela Merkel.
En el puesto 51 aparece El Cuartito, «una de las pizzerías más antiguas de Buenos Aires, fundada en 1934. En esta icónica pizzería los comensales pueden disfrutar de una variedad de deliciosas pizzas en un interior decorado con una impresionante cantidad de fotografías autografiadas y camisetas firmadas por ídolos del fútbol», se describe en el ranking.
Argentina tiene un estilo de pizza particular, que difiere del tradicional italiano. Queso que desborda, múltiples ingredientes, masa crujiente. El Cuartito, particularmente, es un punto neurálgico dentro del circuito gastronómico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a menudo visitado por extranjeros. Ubicada en Talcahuano 937, esta pizzería a pocas cuadras de la 9 de Julio es incluida principalmente en el circuito de los teatros que la rodean.
La Fonda del Tío, que abrió sus puertas en 1978 y ofrece vista al lago Nahuel Huapi en Bariloche ocupa el puesto21. Sirve pastas, carnes, guisos, empanadas, tortillas de papa y minutas.
Así lo describe la revista: «La Fonda del Tío, un destacado destino gastronómico célebre por su auténtica cocina argentina y su encanto rústico y espléndidas vistas del lago Nahuel Huapi lo han convertido en un lugar solicitado tanto por locales como por turistas. Su milanesa napolitana, una chuleta de carne empanizada cubierta con salsa de tomate, jamón y queso derretido, es una delicia para la multitud y una fusión perfecta de influencias argentina e italiana».
Por ello, ocupa su lugar privilegiado dentro de la gastronomía del país. Según Taste Atlas, es legendaria.
En el puesto 18, el más alto de los restaurantes argentinos legendarios, figura la conocida pizzería Güerrin, ubicada en la avenida Corrientes céntrica de Buenos Aires.
«Güerrin tiene un lugar preciado en el corazón de la escena culinaria de la ciudad por sus auténticas pizzas al estilo argentino. Particularmente digna de mención es su fugazzeta, una variante de pizza local cargada con abundante mozzarella y cebollas caramelizadas sobre una masa gruesa y pastosa”, describieron en Taste Atlas.
«El firme compromiso de Güerrin con la calidad y la tradición, demostrado a través de este plato insignia, ha sido fundamental para dar forma a la cultura de la pizza en Argentina», agregaron.
Declarada “Sitio de Interés Cultural” por la Legislatura de la Ciudad en 2011, funciona en ese mismo lugar desde 1932 y no tiene sucursales ni servicio de envíos.