El 7 de junio se celebra en nuestro país el Día del Periodista, fecha instituida en homenaje a la fundación el primer diario de la etapa independentista de Argentina: La Gazeta de Buenos Ayres.
En nuestra ciudad, las autoridades municipales brindaron un agasajo a los periodistas locales y trabajadores de la comunicación, con una cena compartida en el restaurante Biguá, en la Laguna Sauce Grande en la noche del jueves.
«Le doy las gracias al equipo de Prensa, a Claudio Espinosa y equipo, y a todos aquellos que desde las radios y desde distintos medios difunden las noticias de la comunidad, de la cultura, del deporte», manifestó Hernán Arranz tomando la palabra antes de brindar y saludar a los presentes.
Mensaje del arzobispo Azpiroz Costa
Por su parte, el arzobispo fray Carlos Azpiroz Costa, destacó la tarea que realizan quienes tienen la responsabiliad de ser «formadores de opinión», que incluye llegar a “la cabeza, al corazón y a las manos” de la gente.
«Cada año celebramos esta conmemoración y –claro- los pensamientos se acumulan detrás de la gratitud por la tarea que ustedes realizan (¿quién no se refugia en periodistas más o menos conocidos, más o menos confiables, más o menos amigos, etc. para saber «algo más» acerca de lo que pasó, lo que está pasando o lo que pudiere pasar?)», señaló Azpiroz Costa.
«Cuando se habla de la misión del periodismo suele decirse que –entre tantas tareas- se destacan por la delicada e inmensa responsabilidad de ser «formadores de opinión» (una perspectiva inseparable de su labor cotidiana en todos los medios de comunicación: gráficos, radiales, televisivos, redes sociales… etc.)», continuó.
El mensaje completo del arzobispo
Mensaje para el DÍA del PERIODISTA ARGENTINO
Viernes 7 de junio, 2024
Aniversario de la fundación de “La Gazeta” Por Mariano Moreno
Cada año celebramos esta conmemoración y –claro- los pensamientos se acumulan detrás de la gratitud por la tarea que ustedes realizan (¿quién no se refugia en periodistas más o menos conocidos, más o menos confiables, más o menos amigos, etc. para saber «algo más» acerca de lo que pasó, lo que está pasando o lo que pudiere pasar?).
Cuando se habla de la misión del periodismo suele decirse que –entre tantas tareas- se destacan por la delicada e inmensa responsabilidad de ser «formadores de opinión» (una perspectiva inseparable de su labor cotidiana en todos los medios de comunicación: gráficos, radiales, televisivos, redes sociales… etc.).
Tomado de la mano de esa «tarea – vocación – misión», pienso en la formación de “la cabeza”, “el corazón” y “las manos”.
Cuando nos referimos generalmente a “la cabeza” solemos señalar prioritariamente al desarrollo y educación de la conciencia, el acceso al conocimiento, el estudio de la realidad. Se trata, claro, de iluminar y no encandilar para comprender mejor; de “abrir” la cabeza aun cuando nos referimos, por ejemplo, a la tradición, que no solamente ha de conservarse, sino que también crece…
También ustedes forman “el corazón”. No se trata simplemente de “pensar” (de un modo exclusivo o excluyente). La apertura a lo verdadero, lo bueno, lo bello ayuda también a crecer en las relaciones de amistad social, ayuda al encuentro y al diálogo, etc. Necesitamos de ustedes que nos ayuden a formar corazones que no conozcan el mal sino para definirlo, combatirlo y evitarlo.
Finalmente, con su labor, nos ayudan también a construir un mundo mejor a través de la convivencia mutua, la solidaridad fraterna, la paz. Siempre que hablamos de construir –al menos como signo- señalamos las manos. ¡Sí! ¡manos abiertas para edificar, sembrar, servir a los demás! ¡No las cerremos nunca para golpear, herir, matar, destruir!
Los pensamientos han de ser acunados en el corazón y así manifestarse en las buenas obras.
Sencillo decirlo, toda una vida para asumirlo y ponerlo en práctica.
¡Manos a la obra!
Gracias por ayudarnos a crecer.
+ Fray Carlos Alfonso Azpiroz Costa OP Arzobispo de Bahía Blanca