Los extranjerismos son aquellas palabras, expresiones o giros de idiomas extranjeros que se introducen en el propio, sin cambios y con igual significado.
Tal es el caso, por ejemplo, de las de origen inglés «barman» (persona encargada de servir o preparar bebidas en la barra de un bar, especialmente si es experta en cócteles y otras combinaciones alcohólicas); «marketing» (mercadotecnia; conjunto de principios y prácticas que buscan el aumento del comercio, especialmente de la demanda); o «ranking» (clasificación de mayor a menor, útil para establecer criterios de valoración).
En casos, se adaptan a las reglas de acentuación, como, por ejemplo, la palabra «máster» (maestría), del inglés master, a la que en español se le agrega la tilde.
A su vez, «castellanizar» es adaptar la ortografía de una palabra extranjera a las normas fonológicas, morfológicas u ortográficas del castellano, como en los ejemplos que siguen.
Sommelier
Palabra de uso corriente aunque se ha castellanizado como «sumiller», para designar a la «persona experta en vinos y licores que, en los grandes hoteles, restaurantes, etcétera, sugiere a los clientes la bebida apropiada para la ocasión».
Procede del idioma francés, originado en la Edad Media: en los viajes, los señores nombraban a una persona responsable de cuidar los bienes de valor que transportaban durante muchos días.
En esa época coexistían distintos sommelier: los había de vinos, de armas, de panadería; en todos los casos eran los encargados del transporte, abastecimiento y stock en los castillos.
Balotaje
Del francés ballottage: En algunos sistemas electorales, segunda votación que se lleva a cabo entre los dos candidatos más votados en la primera, cuando ninguno ha obtenido la mayoría requerida.
Cúter
También denominado trincheta, cortante o cuchillo cartonero, deriva del inglés «cutter» y su significado es «cuchilla que se guarda dentro de su propio mango y sirve para cortar papel, cartón u otro material parecido».
La herramienta nació en el año 1956 cuando el empresario japonés Yoshio Okada buscando resolver una problemática respecto a la pérdida del filo de las hojas en los cuchillos o navajas que se utilizaban en esa época.
Almohada
Término que proviene del árabe: «funda rellena de un material blando, que sirve para reclinar la cabeza».
Suele utilizarse la frase «consultar con la almohada» con el significado «meditar sobre algún asunto, aplazando la decisión durante un breve tiempo, normalmente por un día».
Jáquer
Del inglés hacker. «Pirata informático. Persona con grandes habilidades en el manejo de computadoras que investiga un sistema informático para avisar de los fallos y desarrollar técnicas de mejora».
Usado generalmente sin castellanizar, la palabra jáquer fue incorporada al diccionario de la lengua española a fines de 2019 como de género común (el jáquer, la jáquer), cuyo plural es jáqueres.
La experiencia me indica que la RAE suele ir a contramano de los hechos. Es decir, pretende castellanizar palabras a las cuales el uso común ya ha adoptado con su grafía original.
Recuerdo que el diccionario RAE de 1971 consignaba la palabra querosino como castellanización de kerosene. En la sección Corrección de un importante diario discutimos si usaríamos esa grafía y optamos por escribir querosén. Que a la postre terminó por imponerse.
En esa época todavía corregíamos gaRapiñada por el usual garrapiñada. El tiempo terminó por consagrar esta última grafía.
En fin que la RAE propone, pero el uso termina disponiendo.