Al inaugurar oficialmente la fiesta, el intendente Raúl Reyes agradeció la presencia del ministro de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires, Javier Rodríguez, y habló de la importancia del evento, que “permite posicionar a Coronel Dorrego en la provincia y el país, con un tema que nos ocupa, que nos gusta, que nos representa: que es la producción.»
Estuvieron presentes también los diputados provinciales por la sexta sección Anahí Bilbao y Emiliano Balbín.
Por su parte, el funcionario provincial manifestó su alegría de compartir el festejo y compartió el saludo enviado por el gobernador Axel Kicillof.
“No solo estamos celebrando el producto, el olivo, sobre todo celebramos el trabajo de todo un año, de los productores y productoras vinculados a esta actividad que termina consagrándose en el olivo que podemos presentar», dijo Rodríguez, afirmando que “es muy importante mantener una articulación permanente con los municipios, de allí la presencia a través de los distintos programas, de los técnicos, de los profesionales y también de la presencia, como en este caso, de un ministro de la provincia de Buenos Aires”.
En el acto por el aniversario de la ciudad cabecera del distrito, Reyes había expresado: “Coronel Dorrego nos encuentra en un buen momento para poder seguir pensando y planificando hacia dónde vamos, sin dejar de reconocer de dónde venimos, quiénes somos, sin dejar de reconocer todas nuestras potencialidades; pero tenemos que plantear hacia dónde vamos y el país lo requiere más que nunca«.
Dorrego crece y apuesta a más
De recorrida por el Vivero Municipal, sede de la Fiesta del Olivo, nuestra colaboradora Mónica Carmelino comenta su vivencia en esta crónica que compartimos a continuación.
Pudimos apreciar gazebos con diferentes propuestas de venta de artesanías locales y regionales. También la venta del producto que identifica a la localidad, aceite de oliva en todas sus variedades, acompañado -por supuesto- de unas ricas aceitunas y pan casero para degustar.
Un gran escenario se ubica en el centro del inmenso lugar, que resultó más que adecuado para esta propuesta.
Sobre el otro lado del escenario se encontraban los puestos de comida, con diferentes y riquísimas propuestas, y la oferta de cerveza en todas sus variedades. Algunos de ellos pertenecían a la oferta birrera de Monte Hermoso, del mismo modo en los puestos de artesanos, donde varios eran de nuestra localidad.
En la parte posterior al escenario, apreciamos una disposición de baños químicos, muy higiénicos y bien ubicados. Con un agradable olor a desodorante perfumado en cada uno de ellos, limpios siempre y con un módulo para personas con discapacidad.
En nuestro recorrido por el lugar, estuvimos con el jefe comunal Raúl Reyes, quien estaba acompañado del diputado Emiliano Balbín. Resaltaba el intendente la gran participación, lo hermosa y bien organizada que estaba la fiesta y recordaba la última anterior a esta, que fue en el Polideportivo Municipal.
“Decidimos trabajar para que esta fiesta crezca porque es un símbolo de los dorreguenses, porque la gente participa no solo concurriendo sino en la organización y atención. Y creo que después de esta pandemia, estamos más felices aun de ser parte de esta propuesta”, comentó en intendente.
Con su espíritu positivo y alegre de siempre, Reyes disfrutó la comida y la bebida en el lugar, junto con el diputado Balbín quien nos expresaba la alegría de haber estado todo el día en Coronel Dorrego y de compartir este momento y tener la oportunidad de estar en el lugar, rodeado de amigos.
En el transcurso del día se desarrollaron actividades de cocina con gran participación del público.
En el escenario mayor se presentó la agrupación “La entramada”, que dejó su música y canto de primera calidad, con un público que rápidamente se sumó a danzar las piezas folclóricas. A posteriori, la maravillosa voz e interpretación de Lucas Oviedo. Dejó en el escenario su interpretación y simpatía. Y el público respondió con alegría y danzando en el escenario improvisado junto al principal.
Cerró la noche Fabricio Rodríguez con un repertorio alejado de lo folclórico que repasó música popular en líneas general. A posteriori de ello y cerrando la noche, la propuesta musical para los jóvenes de parte de disc-jockeys.
Para el domingo hubo que cambiar de escenario debido a la lluvia que durante la noche deterioró el lugar, teniendo en cuenta que no posee calles ni lugares de cemento.
La presentación de los shows musicales se derivó al Teatro Español, y se estaba mejorando el lugar original para el resto de las actividades programadas ya que no había pronóstico de lluvia para el domingo.
En resumen: una fiesta muy bien organizada, con gran participación de la gente y de instituciones del lugar.
Dorrego crece y apuesta a más, y eso se nota.