La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, afirmó que «ninguna vacuna contra la Covid-19 será obligatoria«.
«Es el momento de dar un paso bien grande, de superar cualquier grieta», dijo y destacó la importancia de que la población entienda «la estrategia del Estado nacional» en el tema.
Luego de la noticia de la compra de las vacunas rusas, se multiplicaron por las redes sociales los mensajes de rechazo a la obligatoriedad, lo que hizo crecer la polémica sobre la decisión del gobierno.
Falta de claridad y «fraude científico», denunciaron expertos y profesionales de la salud en torno al desarrollo de las vacunas candidatas aprobadas.
Paralelamente a las críticas, se alzaron voces exigiendo que se apoyen las investigaciones avanzadas por el equipo del Doctor Hugo Luján, del CONICET.
Giro
Pocos días después del anuncio de Fernández, se produjo un giro en la comunicación oficial. «La aplicación de ninguna vacuna contra la Covid va a ser obligatoria. Lo que explicamos es que las vacunas del calendario, por ley, son gratuitas y obligatorias, y que esta vacuna es una situación especial, excepcional», aseguró ayer la funcionaria del Ministerio de Salud.
Vizzotti sostuvo que la campaña de vacunación «va a tener una envergadura y tiene particularidades muy grandes, igual que la campaña que se hizo antigripal después de la pandemia H1N1 en 2010».
Asimismo, indicó que el expediente de la vacuna Sputnik V, de origen ruso, «ya ingresó en Anmat para analizarla y avanzar en los debidos procesos», y explicó que se realizará «una campaña extraordinaria» sobre la que apuestan a que «se construya confianza».
«En la decisión de evaluar vacunas no existe la geopolítica sino que existe la evaluación de la seguridad y la eficacia», subrayó la secretaria de Acceso a la Salud en las declaraciones que formuló esta mañana.
«Será una actividad específica sobre la que apostamos que se construya confianza, y que la población decida voluntariamente y adhiera a la vacunación», añadió.
Por otro lado, informó que en el país «las ofertas concretas que se están analizando, en esta primera etapa, para iniciar la vacunación lo antes posible son las de Astra-Zéneca, de Pfizer; la de Rusia, de Johnson & Johnson y de China» y agregó que, en la primera fase, se definió «no tener fines de lucro por parte de los laboratorios».
«La complejidad de esta campaña será muy grande, seguramente se deberán aplicar dos dosis. Hay vacunas que se almacenan a diferentes temperaturas; algunas son de dos dosis y otras son monodosis, es un desafío grande que tenemos como país», aclaró.
Al ser consultada sobre la comercialización de las vacunas, refirió que «es habitual que haya un intermediario para la importación» aunque sostuvo que «eso es algo que define el laboratorio productor y no el país».
«Para todas las vacunas de todos los laboratorios y todos los países se está haciendo a nivel mundial una inversión a riesgo antes de terminar la fase 3 por parte de laboratorios y países», precisó la funcionaria sobre la actual etapa de ensayos clínicos en humanos.
«Estemos con calma y analicemos la situación con la mayor serenidad posible; es el momento de dar un paso bien grande, superar cualquier grieta y la población tiene que entender la estrategia del Estado nacional», subrayó Vizzotti.