El sudoeste de la Provincia volvió a ser elegido para vacacionar por miles de turistas superando, en algunos puntos, el récord que ya había marcado la temporada anterior.
Podía suceder que, tras dos temporadas previas signadas por la pandemia, que desalentaron los viajes al exterior y las estadías por mucho tiempo, los destinos turísticos regionales sufrieran una merma este verano. Sin embargo, no sucedió así.
Empecemos la recorrida por nuestro distrito. Monte Hermoso, como lo apuntó el secretario de Turismo Franco Gentili, “presentó números superiores a lo esperado”.
En tal sentido, refiréndose específicamente al mes de enero el funcionario dijo que “Más allá de que las expectativas eran altas porque veníamos teniendo durante el año fines de semana largos y eventos con buena aceptación del turismo y mucha gente visitándonos, la ocupación promedio fue por encima del 90%, y todos los alojamientos repletos durante los fines de semana”.
Febrero no fue la excepción, y la ciudad, lo mismo que la laguna y el balneario Sauce Grande registró picos que también superaron toda previsión.
En Dorrego
El distrito vecino vivió algo semejante. El titular de Producción y Turismo Lucas Errazquin no dudó en calificar la temporada que acaba de finalizar como «altamente positiva”.
Refiriéndose puntualmente a la villa balneria Marisol, remarcó que “La afluencia de turistas crece año a año y eso nos llena de orgullo. En la entrada a la villa tenemos un contador de vehículos, y en este verano la cantidad de visitantes se triplicó”, indicó satisfecho.
“En cada una de las temporadas se realiza una encuesta para saber por qué el turista elige a Marisol, y las respuestas suelen ser las mismas: por la amplia playa con la que cuenta (50 kilómetros de extensión) y por la variedad de opciones que ofrece, como la pesca, el baño en el mar (con cobertura de guardavidas) y la cercanía con la desembocadura del río (el Quequén Salado entra al mar hacia el norte de la zona urbana)”, describió Errazquin.
También el joven funcionario se mostró más que conforme y agradecido por el resultado de la Fiesta Provincial del Olivo, cuya 14ª edición tuvo lugar dando cierre a la temporada estival.
«Estamos muy complacidos desde la comuna por el resultado de la fiesta y fundamentalmente por la positiva respuesta recibida de parte del público, no solamente de Coronel Dorrego sino también de una vasta zona cercana que participó durante los tres días de realización del evento», afirmó.
Tres Arroyos y Patagones
En Tres Arroyos, por su parte, los balnearios Claromecó, Reta y Orense mantuvieron también una temporada récord.
“La temporada ha sido de similares características a la anterior que había marcado un récord. El desafío era estar a la misma altura y enero lo estuvo, con un 95% de ocupación en los tres balnearios; fue excelente”, sostuvo el director de Turismo, Alejandro Trybuchowicz. Y si bien advirtió que “en febrero bajó al 60 o 65%”, remarcó que “hay conformidad en todos los rubros”.
Algo similar sucedió en el partido más austral de la provincia. En Patagones “Tuvimos mucha gente recorriendo el distrito, sobre todo los balnearios como Bahía San Blas, Los Pocitos y la Villa Turística 7 de Marzo”, contó el titular del área de Turismo, Roque Barilá, y agregó: “El balance es más que positivo”.
“Si hacemos un recuento de los ingresos, sobre todo en Bahía San Blas, la estadística nos demuestra que hemos tenido un crecimiento importante respecto de enero del año pasado”, aseguró.
Turismo termal
Si bien Carhué es un destino turístico visitado todo el año, 2023 afianzó la estadía de los turistas durante los días de semana. Según relató el secretario de Turismo de Adolfo Alsina, Pablo Ledesma, “mejoró mucho el movimiento entre semana y también el general comparado con las temporadas anteriores, sobre todo si pensamos que este ha sido un verano donde los destinos del sol y playa se han visto fortalecidos”.
En ese sentido, aseguró que Carhué y el lago Epecuén han tenido “un verano muy bueno, con una gran ocupación durante los días de semana inclusive”.
Cabe recordar que en el comienzo del fin de semana largo de carnaval, el Lago Epecuén ofreció un espectáculo singular al aparecer cristalizado y con la costa cubierta de «nieve salada». El fenómeno es habitual en la temporada invernal y responde a la alta salinidad del espejo de agua. Debido a las bajas temperaturas que trajeron esos días de febrero, el sulfato del lago se cristalizó y gran parte de la costa se cubrió con la llamada “nieve salada” para las delicias de los turistas.
En las sierras
Aunque las altas temperaturas que predominaron toda la temporada desalentaron el movimiento en destinos turísticos sin espejo de agua, la Comarca Serrana recibió mucha afluencia de visitantes. “Tenemos la suerte de ser un destino que cada vez se está eligiendo más”, dijo el secretario de Turismo de Tornquist, Gustavo Sandoval.
Y explicó que esta temporada “las actividades con agua tuvieron más salida permanente. Tenemos la reserva de Sierras Grandes con varias excursiones, pero la que más movilizó es la relacionada con el agua”.
Desde estos destinos turísticos coinciden en que el desafío es convertir a estos puntos en opciones para todo el año. Mientras trabajan para que eso suceda, esta temporada demostró que en verano el sudoeste bonaerense es una opción consolidada.
Fuente: propia y Sexta Sección