Cuando hablamos de empresas públicas nos remitimos al imaginario colectivo y recordamos el nombre de muchas de ellas deficitarias e ineficientes; de hecho, ese fue uno de los principales argumentos empleados en tiempos del menemismo por quienes sostenían, respecto a las privatizaciones, que se había logrado ingresar dinero a las arcas del Estado y que, a su vez, dejaron de generar un déficit mensual.
Sin embargo, las políticas y las gestiones deben ser evaluadas en sus contextos y dependiendo de los objetivos propuestos al inicio de la implementación o la formulación de un programa de gobierno. Entendemos que no hay “ismos” válidos al respecto; que depende del caso cuál será la mejor forma organizacional a implementar.
¿Toda empresa pública es ineficiente?
El caso de INVAP rompe el paradigma sostenido por la escuela liberal más ortodoxa.
Desde la Jefatura de Gabinete de Ministros (2022), como parte del ciclo de Conferencias Magistrales que acompaña al Programa Estado Integrado del INAP (Instituto Nacional de la Administración Pública), se presentó la investigación «Empresas públicas y mixtas, tecnología y desarrollo. El caso INVAP».
El trabajo profundiza el análisis sobre una empresa emblemática como INVAP (Investigación Aplicada), líder en proyectos de desarrollo tecnológico desde la provincia de Río Negro.
INVAP, una sociedad del Estado fundada en 1976, se constituyó en un caso paradigmático de desarrollo, al conectar la investigación básica con la industria y alcanzar así la vanguardia en áreas como tecnología nuclear, defensa, aeroespacial, seguridad, ambiente y medicina.
En este sentido, el investigador Pablo Nemiña enfatizó la vinculación del INAP con INVAP como empresa pública que tuvo y tiene un papel central en el aporte al desarrollo tecnológico y económico del país. “INVAP se transforma, de esta manera, en un caso paradigmático de desarrollo desde la academia, el Estado y el sector productivo, al lograr que la investigación básica se conecte con la industria.
Este modelo es clave para repensar una inserción argentina en la economía internacional que impulse el desarrollo económico y la ampliación de las capacidades tecnológicas”.
A su vez, Marcelo Basigalup, subgerente general de INVAP, agradeció que la empresa haya sido tomada como objeto de estudio ya que se trata de una forma de investigar las políticas públicas y de Estado. “INVAP no podría existir sin decisiones políticas y sin políticas de Estado que proyecten el desarrollo nacional con impacto social”, enfatizó.
Entendemos que se trata de un caso que sirve para repensar las lógicas de vinculación con el mercado. Desde el punto de vista económico, no podemos desconocer la existencia de bienes esencialmente públicos, con lo cual es relevante pensar en estos aspectos, más allá de la existencia del mercado. Regular o dejar hacer es siempre una política pública. ¿Qué política será más acertada en cada caso?