La concejal de Juntos por el Cambio Silvia Manzo, titular del bloque que integra con José Luis Sánchez, publicó un escrito para explicar las razones de la oposición de su sector ante proyectos de repudio al gobierno nacional que se han debatido en las últimas sesiones.
Reproducimos de manera textual las aclaraciones formuladas por la edil.
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Han sido ya cuatro o cinco las sesiones donde se vertieron repudios a medidas tomadas por el Ejecutivo Nacional; desde la banca de Juntos por supuesto no los acompañamos y hemos sido atacados por pensar diferente; pero hay algo que no se entiende: si pensáramos igual seriamos oficialistas locales, pero nuestras ideas están más alineadas con el gobierno nacional que con el local, y ese es el lugar que ocupamos y defendemos.
Pertenecemos a Juntos, estuvimos y estamos en la línea de Patricia Bulrich y Cristian Ritondo, nunca nos movimos de este lugar y siempre actuamos con honestidad ideológica y acorde a esa línea estamos trabajando hoy.
Entendimos, al igual que nuestros dirigentes, que el 53 por ciento de los montermoseños eligió este presidente, y acá estamos nosotros para representarlos, conformando la única oposición en el HCD, para ser la voz de los que pensamos diferente, de los que deseamos un cambio en el rumbo político social y económico; tratando de sostener la verdad (ante tanta difamación de los hechos), las medidas, y acompañar las decisiones.
En la última sesión se habló del cierre del Programa Nacional de Orquestas y Coros, nacido por decreto de una presidente que en vez de ocuparse de la economía, la seguridad, las relaciones internacionales, como corresponde a la función de presidente, se dedicó a crear programas populistas para conquistar voluntades; el actual presidente decide que esos programas no le corresponde ejecutarlos a Nación y los deja de financiar, lo que no impide que los municipios, a quienes si les compete esa función social se hagan cargo, tal como resultó acá.
Esto es simple, se están ordenando las responsabilidades, roles y funciones. Nadie cerró nada, el programa continúa en las manos que corresponde, el municipio. Incluso una concejal repudió que desde Nación se pida rendición de cuentas por el dinero entregado, pero lo que corresponde cuando se administra dinero ajeno es hacer la rendición pertinente.
Si algo debemos entender los argentinos es que no hay nada gratis, si no lo paga uno lo pagan otros, pero gratis no existe. Y cuando creemos que lo paga el Estado lo pagamos todos…
La gente no quiere más subsidios ni dádivas, sabemos que muchos se enojan cuando digo esto, pero es la verdad que el 53% manifestó; la gente quiere trabajar y ganar su dinero, y decidir en qué gastarlo, qué comprar, qué comer, qué hacer con él. El trabajo dignifica.
Cuando un gobierno regala o da algo, sea un bien o un servicio, o reparte, es el funcionario el que está tomando la decisión de que cómo y cuándo tener o hacer, o sea está imponiendo su gusto o deseo, está doblegando, sometiendo o comprando voluntades.
Cuando un gobierno genera condiciones de estabilidad económica (frena la inflación), seguridad jurídica (todos somos iguales ante la ley, no hay privilegios), permite la competencia (da libertad para comprar y vender), estimula que se generen fuentes genuinas de trabajo y producción; le devuelve a las personas el poder de decidir sobre su vida y sus bienes.
Este es el gran cambio al que apostamos los que acompañamos al presidente y su plan diferente de gobierno. No tenemos certeza de que sea exitoso, sabemos que es duro y doloroso el principio del camino, pero si estamos seguros de que con iguales prácticas a las que tuvimos en los últimos 20 años obtendremos siempre los mismos catastróficos resultados. Estamos dispuestos a sacrificarnos y arriesgarnos al cambio.
Yo dije que no hay plata y que somos un país pobre, parafraseando al presidente, pero en verdad creo que usé una frase equivocada, no somos pobres, nos empobrecieron con las malas políticas económicas y con la impune corrupción con que nos gobernaron las últimas décadas.
No quiero dejar de mencionar que se habló también en la última sesión de represión. Represión sufren o sufrían las víctimas de los violentos sin poder expresarse; los vecinos de Capital o de grandes ciudades al no poder abrir sus negocios o no poder circular por culpa de los que se creen dueños de las calles.
Se olvidan que el derecho a manifestarse no puede coartar el derecho a circular de los otros, y mucho menos pueden, en ejercicio de sus derechos, destruir los bienes de la comunidad (plazas y calles) ni los bienes de otros (vidrieras y vehículos). Si la ley no se cumple es función del Estado recomponer el orden.
La libertad de unos termina donde empieza la de los otros. Simple, la violencia no genera derechos, ahora los ciudadanos tienen la ley de su lado. Y como dice la ministra de Seguridad “el que las hace las paga”.
Hace cinco meses el pueblo habló a través de las urnas, no se equivocó al elegir por el 53 por ciento al presidente como suponemos no se equivocó al elegir por el 56 por ciento al intendente. El pueblo eligió libremente el rumbo que desea para la ciudad y el país.
Así como hemos apoyado en todo lo que consideramos pertinente al intendente sin repudiarlo por las decisiones cuando no coincidimos, como por ejemplo la implementación de la nueva “tasa a empresas extra locales”, del mismo modo respetamos al presidente en sus decisiones, y lo apoyamos aun en las disidencias.
Confiamos en el saber popular, y alzamos nuestra voz para representar la mirada liberal en Monte Hermoso. Estamos alineados con este rumbo nuevo, trabajamos y trabajaremos para el éxito de las gestiones porque el éxito del presidente será el éxito de los argentinos.