YPF y Petronas anunciaron una medida que acallará, al menos por ahora, el ruido político que se generó por la indecisión sobre el asiento de la planta para licuar el gas originado en Vaca Muerta que se destinará a la exportación.
Las dos empresas que lideran el proyecto contrataron a una consultora internacional para que audite el proceso de elección. Es Arthur D. Little, una firma de consultoría de gestión, con sede en Boston, EEUU, para darle “transparencia” al proceso de elección, según dijeron fuentes de la petrolera con control estatal.
“Hacen de escribanos, están en las reuniones de decisión, y el día que se defina donde instalar la planta, el comunicado va a ser conjunto de las tres compañías: YPF, Petronas y Arthur D. Little. No queremos que se diga que se eligió el lugar por una decisión política. Estamos haciendo los estudios técnicos y viendo los costos”, se afirmó.
El presidente de YPF, Horacio Marín, luego de los contactos establecidos con representantes de las provincias de Buenos Aires y de Río Negro, envió una carta con siete puntos (tres económicos y cuatro de permisos y ayudas al proyecto), para que los gobiernos provinciales respondan.
“Con esa información, ambas compañías (YPF y Petronas) tomarán la mejor decisión para el proyecto”, dijo este viernes YPF en un comunicado. Se espera que a fines de agosto se haga el anuncio, contó Sofía Diamante en una nota que firma en La Nación.
Como se sabe, la provincia de Buenos Aires daba por sentado que la costosa inversión se destinaría al puerto de Bahía Blanca, en Buenos Aires, pero terciaron las autoridades rionegrinas proponiendo Punta Colorada, en su territorio.
Una condición necesaria es la adhesión al régimen de incentivo para grandes inversiones (RIGI) de la Ley Bases que aprobó recientemente el Congreso nacional, que otorga beneficios fiscales y cambiarios a proyectos con desembolsos de más de 200 millones de dólares.
El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, movió rápido sus fichas logrando que la legislatura provincial aprobara la adhesión al RIGI (incluso fue el primer distrito en hacerlo), mientras su par bonaerense, Axel Kicillof, sigue con su negativa a la adhesión y a cambio anunció el envío al parlamento provincial de un proyecto de ley para crear un régimen particular similar al nacional.
Muy activo para favorecer la instalación de la mega planta en el municipio que gobierna, el intendente de Bahía Blanca Federico Susbielles tomó distancia de los vaivenes de su gobernador y confirmó que el municipio va a adherir al RIGI.
Incluso fue más allá en su disenso con Kicillof: “Si YPF define a Bahía Blanca como locación para la planta de GNL, confío en que va a cumplir con la situación que planteó de hacer ‘el máximo esfuerzo’ por el desarrollo productivo de Bahía Blanca”.
Además, dijo ante medios bahienses que “como intendente voy a hacer todo lo que deba hacer para que Bahía Blanca sea parte del proyecto, vamos a adherir al RIGI en su marco global y general y vamos a generar un mecanismo especial para cada uno de los proyectos que se generen en la ciudad”.