El intendente montermoseño mantuvo un encuentro con el nuevo jefe de Gabinete de Ministros bonaerense, Martín Insaurralde, junto a otros intendentes oficialistas de la sexta sección electoral.
Es en el marco de encuentros similares con jefes comunales afines de toda la provincia que viene manteniendo, acompañado de la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez (también de reciente incorporación), el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Federico Otermín, el nuevo vicejefe de Gabinete, Juan Pablo de Jesús, y el diputado Adrián Santarelli.
Aunque en la comunicación oficial Insaurralde afirma que intercambiaron “experiencias de gestión y planificamos acciones para seguir avanzando y trabajando conjuntamente en cada uno de los distritos de la provincia”, es difícil ocultar que lo primordial es el intento por revertir los flojos números del oficialismo en las PASO.
El intendente local, que además mantuvo una entrevista personal con el funcionario, se refirió a la reunión en estos términos: “Seguimos trabajando con los gobiernos provincial y municipales para que los bonaerenses vivan mejor”.
Además de Alejandro Dichiara, estuvieron Julio Marini, de Benito Juárez; Ricardo Moccero, Coronel Suárez; Esteban Acerbo, Daireaux; Eduardo Santillán, Adolfo Gonzales Chaves; José Nobre Ferreira, Guaminí; Pablo Torres, Laprida; y Roberto Álvarez, de Tres Lomas.
La convocatoria a ocupar este nuevo rol al jefe comunal de Lomas de Zamora, en reemplazo del polémico Carlos Bianco, ha sido interpretada como un cambio precipitado por el deficiente desempeño electoral del Frente de Todos en la provincia en las primarias del 12 de septiembre.
Con el objetivo de mejorar los números en las elecciones del 14 de noviembre, Insaurralde intenta comprometer en la campaña electoral a los jefes territoriales, comenzando por afianzar su vínculo (no con todos tiene buena relación) y al mismo tiempo garantizar la armonía entre los intendentes partidarios y el gobierno provincial.
Su cercanía con Cristina Kirchner y su hijo Máximo tiene también su relevancia, según sea la valoración de ese dato. Muchos lo celebran, como puede ser el caso de Dichiara, pero en otros genera recelo o desconfianza.
De todos modos, la mayoría espera que Insaurralde evite los errores previos a las PASO, como la falta de coordinación para la presencia en los municipios de altos funcionarios nacionales en coincidencia con la difusión de la meneada foto del festejo en Olivos.