La extensión de la cuarentena que el Gobierno anunciará en las próximas horas a raíz del coronavirus obligó al Banco Central a recalcular y ampliar a su vez los beneficios que había fijado para los vencimientos de las tarjetas de crédito.
Pero ahora que se sabe que el aislamiento continuará, mediante la Comunicación A 6461, redujo aún más la tasa -con un tope de 43%- y estableció que las entidades del sistema financiero deberán refinanciar en forma automática los saldos impagos de tarjetas de crédito a un año de plazo, con 3 meses de gracia, en 9 cuotas mensuales, iguales y consecutivas.
«Los clientes que opten por no pagar el total del vencimiento no deberán realizar trámites para acceder a este beneficio», indicó la entidad monetaria en un comunicado.
La entidad dispuso que los saldos impagos correspondientes a vencimientos de financiaciones que operen entre el 13 y el 30 de abril «deberán ser automáticamente refinanciados, sin necesidad de trámite alguno por parte del titular de la cuenta». Sí será necesario pedir un «stop debit» si el cliente tiene el pago de la tarjeta en débito automático.
Los bancos emisores deben ofrecer al menos tres meses de gracia y 9 cuotas fijas. Así, las cuotas comenzarán a pagarse en agosto a un valor de 147 pesos por cada 1.000 pesos refinanciados.
Esos saldos refinanciados podrán ser precancelados total o parcialmente en cualquier momento y sin costo –excepto el interés compensatorio devengado hasta la precancelación– cuando el cliente lo requiera.
Esto quiere decir que el cliente puede no pagar en abril y postergar el pago de la totalidad del saldo para agosto si quiere. Pero, en este caso, corren los intereses desde ahora hasta el día de pago.
Fuente: Clarin