El intendente Marcos Fernández dialogó con la prensa tras la jornada de ayer en la que nuestra ciudad, como toda la región, se vió afectada por un fuerte temporal.
“Se dio el cuadro meteorológico que se había planteado, todo hizo que fuera un día desapacible, donde la inundación rompió todo lo que había al paso: árboles, cableados y hasta los paradores recibieron el embate”, comentó.
Fernández puso de relieve que en Monte «en líneas generales, toda la gente pudo pasar el temporal en sus viviendas. Hubo un caso de un madre y su nene evacuados porque tuvieron un problema en el edificio donde viven».
La Municipalidad había alertado a los vecinos, en efecto, sobre la necesidad de evitar la circulación debido a la anegación de muchas calles y al peligro que representa la presencia de ramas y otros objetos caídos.
“A lo largo de todo Monte vimos voladuras de techos, caída de cables y arboles. Los problemas mayores son de energía, Sauce Grande lleva un día y medio sin energía”, explicó el intendente.
«En cuestión de Educación suspendimos todo. Y con respecto a los servicios urbanos están en marcha dentro de las posibilidades, tratando de empezar a ordenar todo lo que desordenó el temporal”, detalló Fernández.