Mediante la Resolución 305 del Ministerio de Desarrollo Agrario, el gobierno provincial declaró el estado de emergencia y desastre agropecuario en explotaciones rurales de Coronel Suárez, General Villegas, Pellegrini, Salliqueló y Tres Lomas.
Respondiendo al reclamo de las entidades del sector, la cartera que conduce Javier Rodríguez decidió, además, que la medida se extienda hasta el 31 de octubre.
La declaración de emergencia o desastre agropecuario abarca a más de la mitad del territorio bonaerense. Eso implica beneficios impositivos y crediticios para los productores que poseen campos en las zonas afectadas por la sequía.
Se informó que esta extensión solo rige para una lista de campos que fueron aceptados por la Comisión de Emergencia y Desastre Agropecuario bonaerense.
«Si bien no presentan una afectación lo suficientemente densificada que justifique su inclusión en la figura de Emergencia y/o Desastre Agropecuario, la magnitud de los perjuicios sufridos a nivel predio determinan su aprobación bajo el régimen de Emergencia y/o Desastre Agropecuario con carácter Individual», expone la norma.
Las empresas o productores propietarios o arrendatarios de las tierras que fueron declaradas en emergencia serán favorecidos con prórrogas para pagar el impuesto inmobiliario rural y tendrán la posibilidad de acceder a créditos bancarios con tasas especiales.
Como quedó dicho, la mayor parte del territorio bonaerense se encuentra en emergencia agropecuaria, resultado de un período prolongado de casi tres años consecutivos de sequía.
Ahora, distintos reportes climáticos pronostican un cambio de escenario, sobre el que hemos conjeturado en este medio, con lluvias que ya se han registrado y que se espera continúen, sobre todo en lo que se denomina la zona núcleo de producción agropecuaria.