La expresión «ir para atrás como el cangrejo» se utiliza para significar replegarse o ir en sentido contrario al esperable o aconsejable, pero lo inexplicable es que (aunque eventualmente pueden retroceder) los cangrejos se mueven lateralmente, no hacia atrás. Su estructura corporal y patas están adaptadas para ese tipo de movimiento.
El uso de la frase es más común en áreas costeras y rurales, donde la gente tiene más contacto con los cangrejos y su comportamiento. Es de uso popular especialmente en Colombia, Venezuela y Ecuador, pero también en Argentina.
Aunque no hay una fuente única que explique su origen, hay varias teorías.
– Movimiento aparente: Aunque los cangrejos se mueven lateralmente, vistos desde ciertos ángulos puede parecer que se están moviendo hacia atrás. Esta percepción visual podría haber originado la expresión.
– Influencia africana: En algunas culturas africanas, el cangrejo es un símbolo de retroceso o movimiento hacia atrás. La esclavitud y la influencia africana en América Latina podrían haber originado la asociación.
– Uso metafórico: La expresión podría ser simplemente una metáfora para describir un movimiento o situación que se considera retrógrada o contraria al progreso.
Indagando en internet se pueden encontrar opiniones de todo tipo, como este insólito texto de alguien que le da una vuelta impensada al tema: «El cangrejo no se caracteriza por retroceder o caminar hacia atrás; todo lo contrario, tiene muy claro el objetivo que persigue y marcha constante hacia la búsqueda de sus propósitos, debiendo atravesar muchas dificultades en su camino, pero eso no lo detiene en su aventura por la vida».
Agrega que «además, el cangrejo es humilde y respetuoso, ellos no son animales que ataquen por su propia iniciativa, sino que más bien procuran alejarse de los problemas y peligros resguardándose en sus madrigueras a la espera del momento propicio para continuar su viaje; pero ello no debe confundirse con debilidad, pues cuando se trata de defenderse, el cangrejo es una muestra viviente de tenacidad, valor y agresividad».
¿Inmortal?
El singular animalito ha dado lugar a otra curiosa referencia.
– ¿En qué piensas? – Nada, en la inmortalidad del cangrejo.
– ¿Qué haces, estás pensando en la inmortalidad del cangrejo?
«Pensar en la inmortalidad del cangrejo» es una locución o expresión popular que se usa para indicar que una persona está distraída, fantaseando sobre algo.
La frase suele emplearse de forma humorística para indicar que una persona no está atenta a lo que debe, sino en un estado emparentado con la contemplación, como si estuviera dejando vagar su mente.
Otra vez el cangrejo asociado a una característica que no le es propia, ya que no es longevo, vive entre tres y 12 años. En todo caso ¿por qué no pensar en la inmortalidad de la tortuga, que vive mucho más?
Sin buenas fuentes para indagar cómo fue que se originó la frase, los buscadores de contenido proponen que puede deberse a la mitología egipcia, en la que el escarabeo (escarabajo), al que se lo relacionaba con el cangrejo, simbolizaba la inmortalidad.
Gugleando, puede encontrarse un pasaje muy interesante que le da sustento a la teoría: «La mitología griega cuenta que Zeus platicaba con un cangrejo quien le explicaba que al caminar de lado engañaban al tiempo, lo que los hacía inmortales. La filosofía dice que al no tener conciencia de sí mismo no advierte que su existencia acabará, por lo tanto, es inmortal».
Foto del encabezado, cangrejo rojo, Museo de Ciencias Naturales Vicente Di Martino