Muestra de la mejor cocina popular italiana, proveniente de la provincia de Lucca, en la Toscana, en España se la conoce con su nombre original, «scarpaccia», de origen incierto, dado que «scarpa» es zapato en italiano.
Es de muy fácil preparación y lleva solo cinco ingredientes: zapallitos, cebolla, harina, queso y aceite de oliva.
Ingredientes
- Para 4-6 comensales
- 4 o 5 zapallitos dependiendo del tamaño (unos 750 gr)
- 1 cebolla
- 120 gr de harina integral o blanca (o de las dos)
- Aceite de oliva
- Pimienta negra
- Sal
- 50 gr de queso de rallar
Preparación
- Cortar los zapallitos en rodajas bien finas
- Picar la cebolla en juliana fina
- Poner ambos ingredientes en un escurridor o colador, con un bol debajo. Salpimentar, remover bien, prensar y dejar que repose unas dos horas, durante las cuales soltará líquido (reservar).
- Encender el horno a 220 grados.
- En un bol grande poner la harina, añadir el líquido que hayan soltado los zapallitos y las cebollas, una cucharada de aceite, pimienta negra y el queso. Mezclar.
- Añadir los zapallitos y la cebolla y mezclar bien todo. Verter la mezcla en una bandeja o fuente de horno de unos 35×25 centímetros forrada con papel de horno untado con aceite. Aplastar ligeramente con las manos para repartirla y compactarla.
También se puede utilizar una bandeja o fuente redonda.
- Esparcir un hilo de aceite de oliva por encima y llevar al horno por 30 o 45 minutos (hasta que se vea dorada).
- Al sacarla del horno desmoldarla sobre una rejilla, darla vuelta, regresarla al recipiente, agregarle unas rebanadas finitas de queso y volver a llevarla unos tres o cuatro minutos al horno para dorarla también del otro lado.
Servir templada y ¡buen provecho!
*Adaptada de El comidista, sitio online sobre gastronomía del diario El País de España