Desde principios del año se murmura en las calles y cafés locales que el jefe comunal Alejandro Dichiara se va.
Esto ha despertado especulaciones de todo tipo. No solo el saber a dónde y por qué se va, sino en “acertar” quién quedaría como intendente.
En este análisis muchos hablan de las ganas de Hernán Arranz de ocupar ese lugar, posibilidad inexistente ya que él no ha sido electo, sino que es un funcionario asignado en el cargo por Dichiara.
También se comentó de lo lejos que Marcos Fernández dice estar de volver al palacio municipal como intendente. Y el nombre que comenzó a pisar fuerte y firme es el de Rosana Sotelo, que para algunos “es Dichiara con pollera”.
Es bueno recordar –para el público en general- que cuando un intendente deja su cargo (no por juicio político que es otro procedimiento) el que debe asumir es el concejal que lo acompañó en la lista, en el orden que estaban. En nuestro caso: Fernández- Sotelo – Quintana.
¿Llegó el momento?
Sobre fines de esta semana se aseguró que Dichiara se iba «ya». Que por fin había llegado el momento y que en forma inmediata iba a dejar la ciudad, para ocupar un cargo como funcionario en Provincia o en Nación.
Sin embargo, hoy, inesperadamente se dio la ocasión de salir de dudas.
Transcurría el emotivo acto de devolución de pingüinos al mar, en el que había mucha gente. Entre los presentes, estaba Dichiara, distendido, relajado. Así es que aprovechando la ocasión le llegó –inevitablemente- la pregunta por parte de nuestro medio.
Con una sonrisa, dijo llanamente que no. Que, aunque se viene comentando hace rato, «por ahora» no se va, al menos hasta diciembre del corriente año.
El motivo de los rumores, nos explicó, es que su nombre se baraja -entre otros- para ocupar las listas de legisladores. “Pero vos viste cómo es esto, hasta el último minuto no podemos asegurar nada” expresó con sus manos en los bolsillos, en un momento de relax y atravesando las arenas húmedas para llegar de regreso a la costanera luego de acompañar a los pingüinos en su regreso al mar.
Le comentamos, insistiendo, como quien quiere aprovechar una última oportunidad, que se hablaba de su inminente partida. El intendente volvió a sonreír. Retrucando, relató que en el mes de febrero le habían ofrecido un cargo en Aerolíneas Argentinas, pero que no lo había aceptado. Dijo que está muy bien en Monte Hermoso y que asumió un compromiso para con su pueblo; que la gente lo votó y le dio su confianza y por eso era justo que se quedara.
Concluyendo, dijo que podemos asegurar que no se va a ir antes de diciembre. El camino compartido también nos dio tiempo para hablar un poco más de política, de la nacional y también de la local. Pero eso queda para otra nota.