Según trascendió, Alberto Fernández y Axel Kicillof acordaron en una cena con intendentes de la primera y de la tercera sección electoral en la quinta de Olivos, que buscarán la mejor herramienta para permitir que dentro de dos años todos estén habilitados a ser reelectos.
¿El argumento? Según el periódico capitalino Página/12, “una ley no puede cambiar la voluntad popular. El voto debe definir quién gobierna”. La máxima del oficialismo señala que “si la gestión es mala, la gente no te vota” y por eso “aseguran que la norma que impulsó María Eugenia Vidal en 2016 y fue apoyada por Sergio Massa, subestima al electorado”.
Mientras tanto, ingresó a la Legislatura bonaerense un proyecto de reforma que presentó un diputado del Frente de Todos.
Dichiara
Se sabe que ya suman 19 los intendentes que suspendieron sus funciones de gobierno para saltar a los gabinetes nacional, bonaerense y porteño o asumir cargos legislativos.
El volantazo a mitad de camino se entiende como un recurso de los jefes comunales para esquivar la ley de 2016 que impide más de dos mandatos consecutivos.
Tal como el caso del intendente de Monte Hermoso, Alejandro Dichiara, el medio informa que “jefes comunales de licencia asumirían como diputados y senadores provinciales el 10 de diciembre: Mariano Cascallares (Almirante Brown), Walter Torchio (Carlos Casares), Carlos Puglelli (San Andrés de Giles), Claudio Rossi (Rojas), Érica Revilla (General Arenales).
Mientras se desarrollan intensas negociaciones, como quedó dicho fue presentado en la Cámara de Diputados bonaerense un proyecto de ley que deroga el artículo de la norma que limita a dos los períodos al frente de los Ejecutivos municipales.
La iniciativa fue presentada por el legislador del Frente de Todos Walter Abarca, quien le señaló a Página/12 que “limitar la reelección de los intendentes es un retroceso y un avasallamiento de las legislaturas sobre las autonomías de los municipios”. El texto hace referencia exclusivamente a los jefes comunales y no incluye a diputados y senadores provinciales ni a concejales.
El proyecto, explica Abarca, cuenta con el apoyo de algunos dirigentes del oficialismo, pero no de todos y lo mismo hacia dentro de Juntos por el Cambio.
Como trasfondo está la ley 14.836 que deja abierta una ventana legal para quienes pretendan disputar el municipio en 2023: establece que si los intendentes estuvieron menos de dos años y un día en su cargo, el período no será considerado como un mandato. Es decir, quienes renuncien o estén de licencia antes del próximo jueves 9 de diciembre quedan habilitados para volver a ser electos en 2023 y 2027.
Otros casos
La asunción del intendente de Vicente López, Jorge Macri, como ministro de Gobierno porteño y del intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, como presidente del Ente Nacional de Control y Gestión de la Vía Navegable, engrosaron una lista de 19 jefes comunales que pusieron en pausa sus funciones locales y emigraron hacia otros cargos.
En diálogo con Página/12, Jorge Macri negó que su desembarco en la Ciudad tenga como fin volver presentarse en el distrito bonaerense dentro de dos años y se mostró en contra de las reelecciones indefinidas.
“Es bueno que haya un límite a la reelección, nadie es imprescindible. Hubo un Vicente López antes de mí y habrá uno después de mí. Lo que tenemos que hacer es preparar un equipo como el que queda hoy con Soledad Martinez”, expresó Macri, quien gobierna el distrito desde 2011.
Por su parte, Ariel Sujarchuk señaló la semana pasada que la ley que limita los mandatos debe regir a partir del 2027 y no desde 2023. «No se puede legislar para atrás y menos en materia electoral», afirma.
Este argumento se inscribe en que la norma sancionada en agosto de 2016 retrotrae su alcance a 2015 y afecta a los jefes comunales que fueron electos en 2015.
Por eso, hay dirigentes que piden modificar el artículo 7 que dispone que “el momento de entrada en vigencia” de la ley “será considerado como primer período”. Este planteo atraviesa estructuras partidarias y es compartido por algunos dirigentes de Juntos por el Cambio. Por ejemplo, el intendente Julio Garro. «Lo que digo como abogado es que está muy mal aplicada, fue en el medio de un mandato», expresó hace un tiempo el platense, que no podrá ser reelecto.
Más allá de la discusión por los efectos retroactivos, en el Frente de Todos apuntan contra el espíritu de la norma y consideran que se enmarca en el discurso de la “anti política”.
En el gabinete nacional son siete los intendentes de licencia: Jorge Ferraresi (Avellaneda), ministro de Desarrollo Territorial; Gabriel Katopodis (San Martín), ministro de Obras Públicas; Juan Zabaleta, (Hurlingham), ministro de Desarrollo Social; Francisco Echarren
(Castelli), ministro de Transporte; Ariel Sujarchuk (Escobar), a cargo del ente que controla la Hidrovía; y Santiago Maggiotti (Navarro) y Osvaldo Cáffaro (Zárate), que cumplen funciones en el Ministerio de Desarrollo Territorial.
En terreno bonaerense, son cuatro los intendentes con licencia que son funcionarios del gobierno de Kicillof: Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), como jefe de Gabinete; Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), ministro de Infraestructura: Hernán Y Zurieta
(Punta Indio), en la Dirección Provincial de Vialidad; y Héctor Olivera
(Tordillo), en la Autoridad del Agua.
La postura del mandatario provincial es a favor de modificar o derogar de la ley. “Si hay gobernantes que han hecho un buen mandato, tiene el derecho a ser reelectos”, manifestó la semana pasada su jefe de asesores, Carlos Bianco.
En ese sentido, Kicillof encomendó a Insaurralde a construir consenso con el conjunto de las fuerzas políticas en la legislatura bonaerense para avanzar en una nueva normativa. Desde el massismo ya anticiparon que van a sostener la misma posición que hace 5 años y no acompañarán la iniciativa. “Las reelecciones indefinidas hacen daño y nada ni nadie me va a hacer cambiar de opinión”, había sentenciado el líder del Frente Renovado en su momento.