Como año tras año sucede, en una modalidad que lamentablemente ha adquirido frecuencia, los estafadores siguen con sus prácticas, defraudando económicamente a turistas confiados.
La rutina continúa siendo la misma: toman fotografías de casas o departamentos que están ofrecidas en alquiler y les cambian los datos reales por los propios.
Luego publican las imágenes falsificadas en sitios o redes sociales destinadas a ofrecer locación de viviendas temporarias y siempre alguien cae. Por lo general seducido por el valor que se indica, visiblemente inferior a lo que otros piden.
Numerosas investigaciones realizadas tras las denuncias raramente culminan con una resolución favorable para los crédulos locatarios.
Liliana, vecina de la ciudad, dispone de dos propiedades en alquiler y nos relata que ella ya hace muchos años que alquila, entonces tiene un grupo de personas que se repite. No obstante, relata que a pesar de haberse unido a páginas de Facebook para alquileres se sintió un poco presionada por quienes las administran por lo que decidió abandonarlas y gestionar sus negocios de acuerdo a su criterio y a su experiencia.
“A mi me alquila siempre la misma gente o sus amigos”, dice. Le consultamos sobre las localidades de procedencia de sus inquilinos: “Yo no elijo al bahiense para alquilarle porque generalmente invita a toda la familia y la casa se llena de gente, cuando el lugar no está preparado para tantas personas. En general son de La Pampa, Neuquén y algunos del centro de la provincia”, nos relata con su experiencia a cuestas.
También conversamos con un referente del rubro inmobiliario, Federico Blum. Su empresa posee una gran trayectoria; desde hace varias décadas se dedica a los alquileres y es reconocida como una de las firmas con más seriedad y recorrido.
Nos explica que “se conjugan dos cosas: una es la desesperación de la gente que cuando solicita no encuentra y en esa situación hay un aprovechamiento de una parte, pero también es la responsabilidad de quien toma (muchas veces) un alquiler”.
Relata que la mayoría de las veces ocurre cuando expresan que pagaron por ejemplo 10 pesos por una propiedad que claramente se ve que vale 20. “Por lo que habitualmente te piden 20, 21 o 19, no te lo pueden ofrecer por 10”, ejemplifica, y en este punto es que sostiene que esa es la responsabilidad del que busca alquilar.
Resaltó y destacó Blum que hoy tenemos de alguna manera la posibilidad de saber y ver con quién se está tratando, contando también con la posibilidad de buscar en Google la ubicación de la vivienda o de solicitar referencias en los grupos de alquileres. Es decir que quien pretende alquilar no debe hacerlo a ciegas, puede usar estos recursos que la tecnología le ofrece.
“Antes, la gente no tenía más que un teléfono fijo”, recuerda, e insiste en que la gente tiene que entender que “las oportunidades no te están esperando”, en clara referencia a lograr un muy buen alquiler a bajo precio.
Más allá de las estafas que son difundidas en las redes sociales, la gente igual siente algún temor. Por eso es interesante valorar y tener en cuenta las recomendaciones y consejos que otro empresario del rubro nos expresó:
– Independientemente de que la gente quiera ahorrar, lo ideal es contratar por inmobiliaria. Eso le evitará problemas.
– En caso de contratar por medio de las redes, es recomendable hacerlo a través de grupos del lugar que se dedican específicamente a eso: alquileres.
– En lo posible verificar la locación del inmueble en Google Street View o Google Maps, para ver si existe coincidencia con las fotos publicadas.
- Street view https://play.google.com/store/apps/details?id=com.google.android.street&hl=es_AR&gl=US
- Maps https://www.google.com.ar/maps/place/Monte+Hermoso/@-38.9874248,-61.2866988,17z/data=!3m1!4b1!4m8!3m7!1s0x958d53e1f7d21aed:0xfda23bb1ada0e7a!5m2!4m1!1i2!8m2!3d-38.9875032!4d-61.2845108
– Establecer comunicación directa con el propietario.
– No enviar o depositar señas de más del 15 por ciento, teniendo siempre en cuenta que si el inquilino no cumple con el alquiler no se le devolverá.
– Asegurarse las comodidades del inmueble: solicitar otras fotos o algún video, más allá de lo que está en Internet. Eso le asegurará que la persona con la que se está comunicando es realmente el propietario.
– Pedir referencias en el grupo donde está la oferta. Es importante para quedarse tranquilo con la transacción que se hizo y evitar estar con temor a ser estafado hasta llegar al lugar.
– Insistir con la verificación de particularidades de la propiedad: si tiene wifi, si tiene televisión por cable o antena, patio, parrilla, piscina, etcétera.
Aunque parezca insistente, esto generalmente pone al locador en guardia, aunque cuando se trata de un propietario real estará dispuesto, sin dudas, a responder con amabilidad a todas las preguntas.
Las vacaciones están hechas para descansar, disfrutar, relajarse. Y si traen sorpresas, mejor que sean agradables.