El Museo Histórico congregó la atención con el anuncio de la incorporación a su muestra permanente de objetos y documentos rescatados de la casa donde funcionó hace tiempo el local bailable Tico Tico (luego denominado La Colina).
Entre los elementos recibidos por gentileza de los actuales propietarios del lugar, además de muebles, objetos de arte y fotografías, sobresale un piano de cola que perteneció a Mario y Alberto, emblemáticos dueños originales de la vivienda que resguarda el paredón blanco de Patagonia al 600, frente a Plaza Parque.
El instrumento, que probablemente no se utilizó durante 30 años, fue rehabilitado por las autoridades del Histórico al punto que fue ejecutado por Martín Maina para interpretar, con Laura Celave en canto, la canción brasilera «Tico-Tico no Fubá».
Ese tema musical, muy famoso en todo el mundo como «Tico Tico», fue compuesto en 1917, curiosamente el año en que encalló en estas playas la goleta Lucinda Sutton, en los inicios del balneario.